Llantos de luna y verso
Fotografía de Isla (Cantabria) LLANTOS DE LUNA Y VERSO Lloraba el poeta, de dolor lloraba; su triste semblante, su eterna mirada, dejaba en las sombras un sabor amargo, mezcla de misterio e inquietud callada. Era noche bella de luna muy clara; él, sintió en el rostro su mano dorada dándole consuelo, tras la mezcla rara de un cielo cubierto de atmósfera diáfana. No volvió sus ojos para saludarla; comprendió allí mismo como le miraba y lanzó un suspiro solo entre la calma. Más tarde, al entorno que lo contemplaba, le ofreció unos versos de enorme presagio que fueron saliendo del fondo de su alma. Lloraba el poeta, con pasión lloraba; al ver que la gente tan solo entregaba vil resentimiento, todo, ¡para nada! ¡Invocó a los cielos! al Dios que de niño con celo adoraba y pidió consuelo, desde su profundo don de la palabra. Entre las estrellas y a la luz del alba ya esconde la luna su sombra plateada…