Los dos soles
LOS DOS SOLES
(Los dos astros)
Quedaba la mar tranquila,
cuando la luna, en la brisa
de la noche despertaba
sus bellos ojos de plata.
El horizonte en silencio
la planicie acariciaba,
con su grandiosa sonrisa
de claridad y de calma.
*
Todas las playas del mundo
con su arena y con sus barcas,
eran fantasmas de sombras
al reflejo de las aguas.
Y los faros de los puertos,
con destellos de luz blanca,
avisaban a los barcos
que hacia tierra se acercaban.
cuando la luna, en la brisa
de la noche despertaba
sus bellos ojos de plata.
El horizonte en silencio
la planicie acariciaba,
con su grandiosa sonrisa
de claridad y de calma.
*
Todas las playas del mundo
con su arena y con sus barcas,
eran fantasmas de sombras
al reflejo de las aguas.
Y los faros de los puertos,
con destellos de luz blanca,
avisaban a los barcos
que hacia tierra se acercaban.
*
La noche, llena de estrellas,
mil diamantes enseñaba
en su bóveda celeste.
Y un cielo de nardos vivo
donde los ojos no alcanzan,
iluminaba el camino
por senderos de esperanza.
*
El mar, su espejo inundaba,
cuando el sol, llegando al punto
del horizonte, asomaba
sus barbas ultravioleta.
Rosáceo e indiferente,
despuntando en el Oriente,
el amanecer, llegaba.
mil diamantes enseñaba
en su bóveda celeste.
Y un cielo de nardos vivo
donde los ojos no alcanzan,
iluminaba el camino
por senderos de esperanza.
*
El mar, su espejo inundaba,
cuando el sol, llegando al punto
del horizonte, asomaba
sus barbas ultravioleta.
Rosáceo e indiferente,
despuntando en el Oriente,
el amanecer, llegaba.
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Autor: Juan A. Galisteo (Galeote)
Imagen: Atardecer en Cádiz
Publicada en Canal Literatura
Un bonito romance para los dos faros que nos alumbran diariamente.
ResponderEliminarUn abrazo en la tarde.
Gracias Rafael, te envío un abrazo.
EliminarBellísimos versos, disfruto mucho leyendo tus poemas.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias Charo, me alegra que compartas ccnmigo esta afición.
EliminarEl mar y la luna dialogando, compartiendo la vida...Y el sol, que llega por la mañana con nueva fuerza y esplendor, Juan. Buen ritmo, buen paisaje y bellos versos, que nos introducen en una dimensión especial,donde la naturaleza habla y sueña.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu amor a las letras, que en estos momentos a todos nos hace bien, amigo.
Gracias María por tus palabras y por sentir siempre esa llamada de la naturaleza
EliminarBello poema, Juan. Espero que estes bien en este extraño mundo de pandemia.
ResponderEliminarGracias Fina. Sí, lo llevo como puedo porque no sobran las razones y la prudencia.
EliminarUn abrazo amiga